Islandia, parte II – círculo dorado, Þingvellir, Geysir, Strokkur, Gulfoss

IMG_20140710_170528Nuestra primera vista fue al llamado círculo dorado, una ruta muy popular en Islandia y quizás una buena introducción a lo que es todo el país. Por la carretera 36 fuimos a Þingvellir, parque nacional donde se separan las placas litosféricas euroasiática y norteamericana. Un lugar histórico donde hace 1000 años se reunió por primera vez el primitivo parlamento islandés. Físicamente es un gran valle que desemboca en un gran lado, desde el centro de visitantes puede apreciarse la separación de las dorsales perfectamente. Aquí podrá tener un primer contacto con las moscas islandesas, grandes hordas pululan por donde hay agua, son muy pesadas, pero inofensivas. Cuidado hacer un pis aquí cuesta 200 coronas. En la foto el Geyser de strokkur, el único en la zona de Geysir que lanza chorros de agua a presión. Está fue nuestra próxima visita la zona de Geysir. Fumarolas, agua hirviendo, algunos geyser ya inactivos y la gran atracción Strokkur, cada 5 minutos laza un chorro de agua hirviendo, cuidado con la dirección del viento.

220px-Gullfoss_2006Siguiendo la carretera llegamos a Gulfoss, una cascada en dos saltos que se precipita sobre una fisura que no deja ver la salida de agua y la sensación es que desaparece. Cuando hablamos de cascada no nos referimos a una cascadita a la española, esto es una barbaridad de la naturaleza, quita el hipo. El tiempo no nos acompaña y menos mal que venimos preparado con impermeables hasta los tobillos, ¡cuánta humedad Dios! Con las mismas nos volvemos al hotel, una guesthouse en la carretera nacional, mañana será otro día.

Islandia, parte I – Reykjavik, aeropuerto Keflavic, Flybus

IMG_20140709_160034Salida de Barcelona, en 4 horas en Reykjavik.
El tiempo al llegar totalmente diferente, dejamos un verano caluroso en el Mediterráneo, por un tiempo ventoso, lluvioso y bastante gélido.
Eran las 2:00 a.m. y era de día.
El Alex hotel es un sitio colocado de forma estratégica en medio de la nada, pero cerca del aeropuerto de Keflavic, Sin duda aupado por los precios más bajos de los americanos que llegan a Europa o viceversa a través de Islandia y que tienen que hacer noche ahí.
Sitio limpio, desayuno incluido pero sin filigranas.

Al día siguiente la visita obligada de la capital.
Fuimos con el servicio de autobuses del aeropuerto, Flybus. Tiene una modalidad que te deja en la puerta de tu hotel, como lo oyes. Esto no lo haría la empresa de transporte donde vivo ni en broma.
Reykjavik es una ciudad europea muy limpia, bonita, la gente es super agradable y por supuesto cara…muy cara.
Por un problema tuvimos que ir al consulado de España, algo totalmente inútil.
Para ir en los autobuses urbanos hay que comprar los tickets en la oficina de turismo o dar el importe exacto al conductor.
Podemos cambiar moneda en cualquier banco que se quedará con una buena comisión.
En Reykjavik las distancias engañan, sobre todo en los planos, la ciudad está muy extendida y las calles son avenidas muy grandes.

Obligado el paseo por la calle Laugavegur y disfrutar de la vida islandesa y ver los escaparates de las tiendas. Son famosas las joyerías.
A Islandia venimos a ver la naturaleza, no la ciudad, así otro día quizás volvamos, pero de momento nos lanzamos al campo y la montaña.

Arroz de marisco portugués

40761_1LArroz de marisco portugués:

Soy un forofo de la comida portuguesa tradicional, quizás el mejor país para comer en todo Europa, ¿exagero?, yo creo que no y he visto mucho.
Voy a explicar como se hace el famoso y riquísimo arroz de marisco estilo portugués.

Ingredientes:

Arroz: un vasito por persona, del redondo.
Cebolla: Una grande por cada 4 humanos.
Ajo: varios dientes.
Tomate: 1/2 kg por cada 4 humanos.
Mariscos y moluscos: cantidad adecuada para estos 4 nearthentales, en gambas, langostinos, almejas, mejillones, cigalas o cualquier otro, a gusto de los comensales.
Cilantro fresco.
Cabeza de pescado.

Preparación:

Se hace un fumé con una cabeza de pescado y las cáscaras del marisco antes pelado, espumar por favor, la cantidad…piensa que para 4 sapiens hace falta12 vasitos como los del arroz.
Se hace un sofrito con los ajos, cebollas y tomates.
Una vez hecho se bate y se aparta.
Se cuece el arroz en la fumé colada con sal al gusto y el sofrito batido, un vaso de arroz por tres de fumé. Tiempo de cocción 14-15 minutos, pero unos 5 minutos antes de terminar echar los moluscos y 2 antes, el marisco.

Ya se puede apartar para devorarlo con el cilantro fresco picado por encima.
Buenos eructos.

LA ESTAFA DEL RECICLAJE

LA ESTAFA DEL RECICLAJE
Compras un paquete de magdalenas y aparte del papel de toda la vida, estas están envueltas en plástico individualmente, después todas ellas en otra bolsa de plástico y por último una caja de cartón y si fuera poco, la cajera te las mete en una bolsa y te imprime un ticket o varios.

¿Qué clase de sociedad, supuestamente civilizada, somos?
¿Solo nos conformamos con llevar todos estos elementos al contenedor?
¿Nadie piensa que no sería más fácil que todo fuera a granel?
¿Porqué debemos devolver de forma gratuita estos elementos para que después nos lo vendan otra vez?
¿Qué fueron de aquellos días donde llevábamos las latas al chatarrero o los cascos (envases) de vuelta a la tienda por dinero?
¿Porqué somos tan pocos los que nos estrujamos las meninges?
¿Qué coño le está pasando a esta sociedad?

LA COSTA VICENTINA

LA COSTA VICENTINAEstas páginas no pretenden ser ninguna guía turística, sino más bien una galería de imágenes salpicada con comentarios y alguna recomendación que otra.
La costa vicentina forma parte de la zona más occidental del Algarve portugués, justamente lo que es el Cabo San Vicente y sus proximidades, en el sur del país.
El Algarve es una zona eminentemente turística, donde el turismo alemán, francés, británico y español invierten sus vacaciones.
Aquí se puede encontrar los paisajes más dispares, desde playas interminables de fina arena, zonas de marismas, islas arenosas de varios kilómetros y bellísimos acantilados y calas.
En este último tipo de costa se enmarca la costa vicentina. Aquí los grandes acantilados, totalmente verticales, son a menudo interrumpidos por playas, formando parajes únicos.
Otra gran virtud de estas tierras es la gastronomía. Aquí todavía se puede comer en muchos restaurantes las comidas tradicionales portuguesas, el plato combinado no tiene sitio aquí.
Las comidas siempre empiezan con el ritual del pan, la mantequilla, el queso curado y el paté de sardinas, es una buena costumbre que algunas veces acompañan con aceituna.
El pan riquísimo, miga prieta, no apto para dietas y con bastante salvado.
En cuanto a los platos, a cual mejor, prueben la ‘Cataplana’ (especie de guiso de pescado o marisco), el bacalao (en decenas de formas distintas), las lulas (especie de calamares), el ‘polvo’ (pulpo en portugués y gallego) y un largo etcétera.
Los postres caseros son tambien exquisitos.

LA COSTA VICENTINA
Playa de Salema

Es digno de mencionar el pequeño pueblo pesquero de ‘Salema’, en él se puede ver a los pescadores reparando sus redes y a los ancianos conversando en el puerto.
Las aguas son cristalinas, azules y bastante fría, aunque siempre puede verse a algún bañista centroeuropeo dentro de ella.
Es un sitio bastante tranquilo, no hay grandes aglomeraciones, estos lugares son más apreciados por el viajero que quiere encontrase con el mar en verano y no sufrir atascos, balonazos, ruidos y playas infectadas de gentío.

LA COSTA VICENTINA
Cala de Ferreira

En Salema pueden probar en el pequeño restaurante ‘Lourenço’,en rua ’28 de Janeiro’, servicio estupendo, limpieza y comida casera, tendrán que esperar para ser servidos, no porque haya mucha gente, sino porque la comida se la harán para usted, recién hecha.
Muy cerca de Salema se encuentra Ferreira. Siguiendo por un camino que lleva hasta la playa, nos encontramos las ruinas de un antiguo fuerte y una pequeña cala que le enamorará nada más verla.

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Alrededores de la Fortaleza (Sagres)

Cerca de Salema se encuentra Sagres y el cabo San Vicente, por estos lugares ya empieza a verse a surfistas que van y vienen. En los alrededores de San Vicente hay los dos ingredientes indispensables para hacer este deporte, viento y mar.

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Alrededores de la fortaleza (Sagres)

En Sagres es obligado la visita a la fortaleza, desde allí hay impresionantes vistas de la línea costera. Acantilados verticales como muros que separan la tierra del mar.

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Cabo de San Vicente

Siguiendo hasta el cabo San Vicente, nos dan la bienvenida los inevitables puestos vendiendonos un poco de todo.
El Cabo es una visita obligada para los portugueses que llegan a esta zona. La nostalgia de épocas anteriores donde Portugal era una potencia marítima y poseía las colonias de Africa y Asia invaden el ambiente.

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Cabo de San Vicente

Aquí se encuentra un bonito faro encima de unas formaciones rocosas de lo más curiosas.

LA COSTA VICENTINA
Carrapateira

Subiendo por la costa con dirección a Lisboa llegamos a Carrapateira, su playa es un paraiso para los surfistas, su belleza es fácil reconocible en la fotografía.

LA COSTA VICENTINA
Playa de Arrifana

Más al norte se encuentra Aljezur, pueblo presidido por un castillo, aquí no hay playa, pero pruebe a comer en Restaurante Primavera (sublime), en la carretera que cruza el pueblo.
La playa más cercana es Arrifana. Este lugar es otra playa de surfistas, como la anterior vale la pena ir allí solo para ver el fantástico paisaje. Hay que recordar que aquí el agua está bastante fría.

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Odeceixe

En el interior muy cerca de allí se encuentra Monchique, zona montañosa salpicada de decenas de senderos por bosques tipicamente mediterraneos, muy apreciado por portugueses.
Y como culmen a nuestra visita Odeceixe, lo tiene todo.

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Playa de Odeceixe

Un pueblo encantador en un valle por el que surca un río que va a parar al mar, muy cerca de allí.

LA COSTA VICENTINA
Playa de Odeceixe

La desembocadura la hace en una playa surcada por acantilados en forma de un enorme circo,el rio se ve afectado por las mareas y engrosa aquí su tamaño. Todo el conjunto le sorprenderá.Esperamos haber despertado por lo menos su curiosidad por estos lugares.