Goðafoss, ballenas
A la mañana siguiente rodeamos este precioso lago, el Mytvatn, tuvimos una vista muy buena desde arriba del cono volcánico de Hverfell.
La subida se hace bastante cuesta arriba y terminas destrozado, pero vale la pena, se tiene una visión general del lago Mytvatn y las fuerzas que esconde la tierra con coladas de lava de figuras caprichosas, el olor a sulfuro y las fumarolas.
Como prometimos a los niños tener un poco de relax, nos fuimos a Hauganes a ver ballenas, pero antes nos paramos en Goðafoss, la cascada de los dioses, cuenta la leyenda que en el momento que los islandeses abrazaron el cristianismo, lanzaron los iconos de los antiguos dioses aquí, es preciosa.
El viaje en barco por el fiordo Eyjafjörður duró unas 3 horas y media, pesca de bacalaos incluida. La excursión fue muy divertida y vimos a grandes ballenas jorobadas rozando el barco… ¡que sensación!
Antes de llegar a puerto, el barco paró para hacer unos lanzamientos con la caña, un lugareño te explica como se pesca el bacalao y a pescar. Es muy muy fácil y denota la cantidad de este pez en esta zona, fue una experiencia muy reconfortante.
Desde ahí fuimos al albergue que reservamos en Akureyri, una estupenda casa de madera completa.
Para cumplir con lo prometido a los pequeños nos fuimos a la piscina municipal, una pasada, no debéis perderse estas instalaciones, sin duda de las mejores de Islandia.